Cómo Correr en Verano sin Sufrir: 10 Consejos para Entrenar con Calor

Ser runner es muy sacrificado. Tenemos la manía de querer entrenar y mantener un estado de forma mínimo para cualquier competición que pueda aparecer a la vuelta de la esquina.

También porque cuando corremos somos capaces de evadirnos y mantener una gran salud mental solucionando, en nuestra cabeza, infinidad de problemas que de otra manera nos cuesta sacar adelante.

Porque correr, sea como sea, es terapéutico.

Pero ay. El verano. El calor y las épocas estivales son el enemigo público número uno para la comunidad runner.

Cómo correr en verano sin sufrir: 10 consejos para entrenar con calor

Ya te has podido imaginar de qué iría nuestro blog de hoy, ¿verdad? No hemos jugado mucho al despiste porque es evidente que nos encanta nuestro deporte y que lo queremos practicar siempre.

Por eso hemos considerado ideal, ahora que acabamos de estrenar de forma oficial el verano (aunque calor ya hacía desde semanas atrás), darte una serie de consejos que a nuestros expertos les funcionan desde hace años.

1.- ¡Lo primero es mantener la hidratación! Este es el más obvio de todos y el primero que hay que tener en cuenta porque al correr se consume mucha agua para que la energía llegue a nuestra musculatura. Pero también es necesaria para poder sudar y reducir la sensación térmica. Cuando se juntan el deporte y el calor del verano es más fácil que nos terminemos deshidratando. Así que sal a correr siempre acompañado o acompañada de una pequeña reserva de agua.

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2.- Busca alimentos frescos y ricos en líquido que faciliten la recuperación del agua perdida entrenando o que te ayuden a preparar esos entrenamientos más tarde. Frutas como la sandía, el melón o un gazpacho bien fresquito entra fácil, es rico y muy saludable.

3.- Aunque siempre lleves en tu equipación runner pastillas de sales, es importante que en tu dieta diaria hagas un pequeño refuerzo comiendo con un puntito extra de sal los días que tengas algún entrenamiento más intenso o incluso competición. De esta manera recargas de forma natural tus depósitos y será más sencillo luchar con los temidos calambres por deshidratación.

¡Atención con las horas de más calor!

4.- Sabemos que en verano cuesta algo más madrugar por vacaciones o por las noches de calor pero insistimos en este consejo: evita las horas centrales del día. Intenta sacrificar la comodidad de la cama para entrenar lo antes posible y reducir, así, la exposición al sol y el calor. Tu mejor rendimiento vendrá con las temperaturas más bajas de primera hora del día.

5.- Adaptar nuestros entrenamientos a las condiciones meteorológicas es, también, básico. Puede que tu entrenamiento marque una intensidad elevada y justo coincida con un día de temperaturas muy altas. Será sensato, entonces, adaptar el entrenamiento y, quizás, reducir la intensidad o duración del mismo. Hay veces en las que menos es más.

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6.- Escoge un outfit runner fresco, ligero y muy transpirable. Te hemos enseñado en diferentes blogs modelos de muchas marcas que cumplen a la perfección con este requisito. Porque nuestra piel necesita respirar y evitar la acumulación de sudor para que el rendimiento sea óptimo. ¡Busca colores claros! Además de darte un look muy cool tendrás mejor protección contra el sol.

7.- Los parques con grandes arboledas son tus mejores aliados. Aunque eso suponga dar vueltas a un circuito aburrido, normalmente hay temperaturas más bajas en los parques con arboledas y césped. Así tu entrenamiento será mucho más agradable y, sobre todo, productivo.

El sol puede ser nuestro peor enemigo…

8.- Usa protección solar. La radiación solar siempre es peligrosa. En invierno o primavera pero sobre todo en verano, cuando nos terminamos exponiendo muchas más horas al sol. Evita problemas de quemaduras que luego pueden derivar en enfermedades graves como el cáncer de piel con una buena crema solar. En el mercado actual tienes muchas opciones adaptadas a necesidades deportivas que se absorben rápido y no dejan la piel pringosa.

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9.- Encontrar una gorra o visera (somos partidarios de las gorras porque ofrecen protección completa del cuero cabelludo) que se ajuste y sea cómoda para tus entrenamientos también es clave. Evitar una insolación está en tu mano y, sobre todo, en tu cabeza. Tienes gorras de todo tipo para elegir, entre las que tenemos en nuestro catálogo.

10.- ¡Descansa! Cerrar estos 10 consejos para entrenar con calor fomentando un buen descanso es, creemos, bueno e importante. Porque respetar las horas de descanso y echarte esa siesta que a veces cuesta, ayuda a que tu rendimiento sea mejor. Un o una runner que descansa es un o una runner que compite mejor.

¿Qué otros truquillos tienes tú bajo la manga para hacer que tus entrenamientos sean más agradables a pesar del calor? ¡Comparte tu sabiduría con nuestra comunidad!